- TE JURO QUE TE JURO

Ya es muy tarde para alzar mi vista y mirar al horizonte, para extender mis brazos y amarte. Este aliento de yegua en mi cara, jadeante, me absorbe lentamente hasta que desaparezco dentro de su cuerpo vibrante de placer y luego este asco, te juro que no lo vuelvo a hacer. Me he quedado sólo en esta esquina con mi idea obsesiva de amarte para siempre. Con ese mismo amor que te juré el primer día y ahora aquí con el corazón en la mano pidiendo que alguien dispare en mi cerebro. Y tú mirándome con lástima, recordando el día en que tus ojos se enamoraron de los míos, tus manos tiemblan ligeramente y disparas una y otra vez y yo no muero. Ríes, el placer del sufrimiento te obliga, y yo cada vez más dentro de esta mi pequeña esquina obligándome a amarte cada día más y más. Golpe a golpe, día a día me has convertido en tu letrina sicológica, donde el mundo vomita su misericordia. Te irritas por la sencilla razón de haberte descubierto tomando purgante en dosis fuera de lo común, lo suficiente para reventarle el culo a cualquiera y te mueres de la risa porque te imaginas, a priori, la cagada que me vas a dar. No lo hagas por favor, te juro que te amo, te juro...que te juro que no lo vuelvo hacer.
Te juro que: cambiaré de colonia, estornudaré tapándome la boca, no escaparme los viernes a París ni a ningún lugar sospechoso de la Mariscal, dejaré de leer a Henry Miller y a Lawrence, renunciaré a mi pasado y a mi destino, reversaré la cirugía estética de mi nariz y me olvidaré de aquel viejo proyecto de circuncisionarme, dejaré mis vicios solitarios pensando en otras mujeres, lo haré solo pensando en ti y solo si tú me lo permites, no te embarazaré nunca más, respetare los días de tu regla, que no volveré hablar mal de los indios, de los negros, de los judíos, de los latinos, de los gringos ni de mi mismo, no volveré a matar búfalos, no me enfermaré, y cortare de raíz mi impotencia, dejaré la mediocridad, Aprenderé a tocar el piano, seguiré siendo atractivo, no volveré a mentir, seguiré siendo un gran burgués que es lo que en realidad me gusta ser, no haré sonar mi oído, no comeré ajos y nunca más dejare de amarte, te juró que de hoy en adelante solo pensaré en ti y desecharé todos los demás superfluos pensamientos de mi mente. TE JURO...QUE TE JURO QUE SI OTRA VEZ TENGO QUE JURARTE, TE JURO, QUE TE MATO. Y ME VOY...CON ELLA POR CIERTO.
Que alguna vez se haga justicia. Le pido a Dios que el amor se muera de muerte natural o de una fuerte VENDICTA BENDITA, (gripe celestial). Solo el amor, el sexo que viva para toda la eternidad. Le ruego a San Gonzalo santo de las venganzas. Ay, Ay, mañana...mañana...ya no existo.